Te bastas a vos mismo. Es dulce y reparador. El templo no está afuera, está en tu interior.
El silencio es perpetuo, continuo, es tu naturaleza; te llena, te produce tanta satisfacción que por primera vez percibes que no necesitas nada. Ya tienes todo lo que necesitas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Hola :D